Noticias

Los estrategas


Publicado el 19/04/2015 a las 22:00

Compartir

Al bombardeo de spots en radio y televisión que le obsequian al respetable los partidos políticos
hay que reparar ahora en su infame contenido. Cero propuestas y pura descalificación. Piensan los
estrategas (por llamarles así) que el electorado es estúpido y que basta con desacreditar al otro
para sumar simpatías a la causa. El PAN decidió emprender su campaña a partir de la lucha
contra la corrupción. Enarbolan la bandera con tal seguridad cual si fuéramos impolutos. Olvidan
escándalos del pasado y bochornosos episodios recientes. Señalan con dedo flamígero los
abusos de dirigentes y gobernantes del PRI. Obviamente, la respuesta del tricolor es rápida y
proporcional. Con el mismo tono y fraseo que utiliza el PAN en sus ataques, exhiben la mugre que
nos ha hecho “distintos y distinguibles” (pero para mal). “Los moches de los mochos” es lo menos
que nos recetan y con razón. Para tener la boca grande hay que tener la cola corta. Luego,
indignados, acuden los representantes de ambos institutos políticos ante el Instituto Nacional
Electoral (INE) para pedir que salgan del aire tan infames spots del otro porque ofenden y
difaman. Vaya hipocresía.

Y mientras perros y gatos se dan con todo, un hilarante pejelagarto avanza desenfadado por el
sendero que le abren los estrategas (que conste que es un decir) de los demás partidos políticos.
Anuncia que va por la tercera en el 2018 y se sirve de los spots institucionales de su nueva
franquicia (Morena) para promocionar descaradamente su propia imagen. Es un auténtico acto
anticipado de campaña que al INE le parece intrascendente.

López Obrador esboza un simple mensaje: “Lo advertimos, dijimos que nos iban a llevar al
despeñadero. Pero estoy optimista; ahora hay un despertar ciudadano. Y es de sabios cambiar de
opinión. Morena es la esperanza de México”. Y por si fuera poco, luego miente y se victimiza —
como siempre— diciendo que en la boleta los pusieron hasta abajo y con letra chiquita. Cínico.

No tiene Andrés Manuel que elaborar sesudas tesis para crecer. PRI, PAN (y en menor medida el
PRD) se han encargado de descalificarse y desacreditarse como opción legislativa y de gobierno.
La luz y el camino soy yo, insinúa el tabasqueño. “No mentir, no robar y no traicionar” son sus
principios, dice. Su biografía lo desmiente, pero eso no importa. Aprovecha el espacio que le
abren los demás para sumar puntos.

La dirigencia del PAN se conduce como hace 30 años. Piensa que el enemigo histórico sigue
siendo el PRI y actúa cual si no hubiera habido alternancia. No aprenden la lección de 2012 en que
todo lo que le restaron al candidato Peña Nieto fue a dar a las alforjas de López Obrador.

Y otra consecuencia del hartazgo ciudadano así provocado es que parte del electorado está
considerando anular su voto o no acudir a votar. Es una pésima forma de manifestar su
inconformidad. A mayor abstencionismo mayor probabilidad de que ganen los impresentables. La
llamada “operación política” suplantaría la libre y consciente voluntad colectiva.

Duele reconocerlo pero George Bernard Shaw tenía razón: “La política es el paraíso de los
charlatanes”.

Artículo publicado en el Periódico El Universal

http://www.eluniversalmas.com.mx/editoriales/2015/04/75963.php